El alcalde de Torrevieja, José Manuel Dolón, ha recibido hoy en el Ayuntamiento a los niños saharauis que pasan este verano en la ciudad dentro del programa ‘Vacaciones en Paz’.

Dolón, que ha entregado un pequeño obsequio de material escolar a cada uno de los niños, les ha deseado unas felices vacaciones y se ha mostrado satisfecho “de que volváis a estar en Torrevieja con estas familias de acogida que os dan lo mejor que tienen, empezando por el cariño”.

El primer edil ha recordado que “los niños han nacido en mitad de un conflicto, que esperemos que acabe pronto con la devolución del territorio que se les usurpó”, deseó el alcalde, quien agradeció especialmente la labor de las familias de acogida.

Carmen Pérez, presidenta de la asociación Familias de Acogida de Niños Saharauis –FANS-, que es la encargada de traer a los niños del programa a Torrevieja, dio las gracias al Ayuntamiento y “a título personal a José Manuel Dolón por su implicación y el apoyo que presta a la causa”.

Pérez tuvo palabras para las familias “muchas de ellas nuevas este año y que están sufriendo las dificultades que entraña acoger a alguien que tiene una cultura diferente, que no conoce el idioma y que además está lejos de sus padres. No es fácil ser familia de acogida pero lo cierto es que cuando acaba el verano casi todos quedan con ganas de volver a serlo el siguiente año”, ha comentado.

Y en este sentido ha hecho un llamamiento a otras familias torrevejenses “solidarias, que las hay –ha matizado- para poder traer a un número mayor de niños. Este año han sido diez y esperamos que el próximo año puedan ser más”.

El número de niños que viajan lo hacen en función de las familias que estén dispuestos a recibirlos. No se necesita ningún requisito específico, “solo tener ganas de hacerlo. Antes venían desde los 6 años, ahora como no hay suficientes familias, todos son mayores de 10 y solo pueden venir durante 3 veranos”, ha explicado la presidenta de FANS.

Durante estos días, los niños, que proceden de la República Árabe Saharaui Democrática, disfrutan de la Escuela de Verano, jornadas de ocio y también son sometidos a distintas pruebas médicas.