Los servidores son aparatos informáticos que tienen la capacidad de almacenar, distribuir y suministrar información. Su funcionamiento es bastante sencillo de entender, ya que operan bajo el sistema «cliente-servidor». El cliente puede ser un ordenador o un programa, que requiere de determinada información para funcionar correctamente. Esta información está almacenada, precisamente, en el servidor. Dependiendo de si ese cliente está autorizado o no para recibir la información, el servidor la proporcionará cuando este la demande. En el ámbito empresarial, su importancia radica en que contiene todo tipo de datos valiosos para las operaciones del negocio. ¿Qué servidor es más conveniente para las empresas?

¿Qué servidor elegir?

Pymes

La última tendencia de las pymes es tener servidores en la nube. Esto se debe a que la inversión suele ser menor, lo que es perfecto para los negocios que están dando sus primeros pasos o no tienen una operación tan grande. Por otro lado, los servidores en la nube permiten una implementación mucho más rápida por un costo menor. Para una empresa pequeña, el costo de instalar un servidor y mantenerlo podría resultar muy grande, por lo que los servidores en la nube ofrecen una mejor solución.

Empresas grandes

Por el contrario, las empresas grandes sí podrían estar preparadas para afrontar inversiones más grandes en relación con los servidores. Asimismo, muchas veces, puede que requieran tener más de uno u optar por un modelo que cumpla con determinadas características para satisfacer necesidades específicas. Muchas empresas grandes eligen usar servidores locales, como el IBM XSeries o el Lenovo ThinkSystem. Estos servidores locales son capaces de alcanzar una mayor potencia y permitir las operaciones con simulaciones o software CAD. Por ejemplo, una compañía dedicada a la ingeniería requerirá mayores prestaciones, que solo un servidor local puede alcanzar.

¿Qué otras consideraciones hay que tener en cuenta?

Además de la inversión inicial por la instalación y puesta en marcha del servidor, hay que tener en cuenta su mantenimiento. En el caso de los servidores locales, muchas empresas optan por contratar los servicios de una compañía que se especialice en ellos. Sin embargo, cada vez son más las que cuentan con los recursos necesarios para realizar su propio mantenimiento. En estos casos, también hay que considerar lo siguiente para armar un presupuesto:

• El salario de los empleados que realizan el mantenimiento.
• El costo del sitio en el que se encuentre el servidor.
• La inversión en ventiladores que eviten su sobrecalentamiento, como el costo energético de mantenerlos encendidos.

En suma, estos costos pueden ascender a los 20 000 euros anuales. Sin embargo, cabe destacar que, si la empresa cuenta con más de un servidor, estos valores no suelen cambiar, por lo que podría ser conveniente hacer un mantenimiento propio. En cuanto a las pymes, en ocasiones, el precio de la contratación de un servidor en la nube ya incluye el mantenimiento periódico, por lo que no habrá que destinarle más dinero a esta tarea operativa.

Los servidores son una parte esencial de cualquier empresa. El tamaño y los recursos con los que cuente el negocio determinarán cuál es más conveniente.