En un artículo de Marta Robles nos indica que una chica de 19 años ha cometido suicidio porque no recibía suficientes likes en su red social.

El ser humano es un misterio y un enigma, el ser humano necesita amar y querer y desear, y ser querido y ser amado y ser deseado. Algo tenemos en el cerebro que nos lleva a esa situación, quizás, como en la concepción bíblica, que estamos hechos a imagen de Dios, y, Dios, en la tradición cristiana es Amor y Amar, como definición y descripción.

Marta Robles, en su artículo titulado: “Likes” asesinos, publicado en La Razón, del 18 enero del 2020. Nos narra su interpretación, en definitiva, analiza, la condición humana, en relación a la temática del querer y de la voluntad y del amar y del ser querido, del estimar y del estimarse. Todo se une. La fragilidad humana. La fortaleza humana.

Se calcula una cifra de alrededor de un millón de personas en el mundo, cada año, comete autolisis o suicidio. Suponemos existirán diversas razones y motivos y causas, según culturas y sociedades. Bien hay que indicar, que en algunos sistemas culturales son más propensos que en otros, a la realización de estos actos. Pienso y opino y estimo que la base religiosa es un gran dique de contención contra esta realidad. Las tres grandes religiones monoteístas de Occidente, piensan que esta realidad es un mal, un pecado mortal, que hay que combatir, sin entrar en los motivos psicológicos, sociales, ideológicos, afectivos, históricos, coyunturales que cada persona, puede y pueda sufrir.

Es obvio y evidente, que la religión, y las éticas religiosas en general del mundo, son sistemas de lucha contra este gravísimo problema social y humano y psicológico y existencial, con consecuencias, también metafísicas y religiosas y espirituales. Quizás, no nos educan que la vida es sol y día, y noche y frío. Que ambas realidades forman y conforman la estructura de los seres humanos, en todas las épocas. Y, todas las personas terminan sus vidas, con una colección de tristezas y una colección de alegrías. Lo que hay que intentar es no hacer sufrir, dentro de la legalidad y la moralidad, y, siempre en la propia autodefensa legítima. Porque en definitiva, no estimarse lo suficiente, no autoestimarse lo suficiente es la razón de muchos males. En este caso, esta chica no ha sido capaz de defenderse de sus ideas negativas, del ambiente o  circunstancias que le ha llevado a esa solución que no es solución…

Se ha inventado o, y, descubierto una nueva tecnología, Internet y la informática, y ambos mundos nos están cambiando la sociedad, a, y en todos los sentidos, son tecnologías originarias, que tienen una enorme cantidad de consecuencias. Ya, no hay campo social en el cual no se utilicen y apliquen de una manera y otra. El ser humano esta realizando un enorme esfuerzo de adaptación, algunas, son muy estimadas, otras, las personas se tienen que ir adaptando poco a poco. Pero las tecnologías no solo tienen componentes esencialmente, instrumentales mecánicos, sino en todos los aspectos de la realidad. Las tecnologías no solo cambian técnicas, sino aspectos sociales, culturales, políticos, económicos, incluso metafísicos y religiosos…

“Comprender el viento/ sale la mañana con el zapato doblado/ en esa estructura del ser y estar/ se reciben los cimientos de pasos/ que se elevan a los horizontes de la mirada”. ¿No sé, si tenemos tiempo de pensarnos y mirarnos a nosotros mismos? Cada día recibimos cientos y miles de informaciones potenciales, en las redes sociales, en las comunicaciones de grupos, de llamadas, de teléfonos, de sinfonías de voces. Cada día, en el amanecer de todo y de la parte, se van rompiendo los ojos de las manos en las paredes del instante.

Debemos aprender y enseñar que las palabras tienen consecuencias. Que en la medida de lo posible, debemos utilizar palabras buenas y bondadosas, que sean verídicas y verdaderas, debemos construir un mundo un poco mejor, cada uno en su ambiente, con y en las palabras, debemos amar las palabras y que las palabras amen a los demás. Que las palabras sean sosiego y mesura, si es posible verdad y bien y bondad. Debemos utilizar las palabras como barcos llenos de estima y autoestima. Aprender que no tenemos que hacer heridas con las palabras, aprender y aprehender que las palabras son herramientas esenciales de afectividad. Que no hay que utilizar las palabras gratuitamente. Porque las consecuencias de las palabras, de los actos denominados palabras, son más graves de lo que pensamos.

En el caso del artículo que comentamos, los likes. Antes de una crítica negativa, tendríamos que pensarlo tres o cinco veces. Cierto es, que cada persona, tiene derecho a la defensa legítima y legal y moral, también con las palabras y también con los actos. Porque si no nos defendiésemos, el mal, en una manera o en otra, siempre ganaría… Pero una defensa ajustada a la realidad concreta, a la legalidad,  a la moralidad, al sentido común, a la prudencia…

¿Qué decir, en un mundo tan complejo con tantas variables, tantos condicionamientos, tantas causas…? ¡Pienso, aunque no guste oírlo, que a menos cristianismo, menos cristianismo en los individuos y en los colectivos y en los grupos, en la sociedad, y en el Estado, más sufrimiento para todos nosotros…! ¡Porque la ley jurídica no es suficiente, para un orden equilibrado de la sociedad…! ¡Nadie se rasgue los pantalones, ni la corbata, es una opinión, desde la filosofía religiosa y desde la observación de la experiencia…!