A lo largo de la historia la relación familia-escuela ha vivido una gran evolución, y es en el último tercio del siglo XX cuando los patrones empiezan a cambiar: se rompe el monopolio de las escuelas y sus maestros, entran en vigor leyes educativas que favorecen la participación de los padres y madres en la gestión escolar y el binomio familia-escuela cobra sentido por primera vez.

En aras de los beneficios que supone la implicación de las familias en el desarrollo integral de sus hijo/as, su participación se ha ido introduciendo paulatinamente en las escuelas, las cuales han desempeñado un papel más acogedor para las familias.

Se ha demostrado que la coeducación familia-escuela afecta positivamente en el rendimiento, la motivación y la conducta de los alumnos/as. Ahora bien, ¿cómo se puede alcanzar una colaboración positiva entre ambas partes? Efectivamente, estamos hablando de una relación basada en el diálogo conjunto y la cooperación, siendo la comunicación la clave para lograr una buena sinergia.

En el cambio actual del paradigma educativo, la comunicación debe ser un elemento de gestión y motivación que permita consolidar un espacio en el que la cultura del centro crezca desde las relaciones interpersonales. La mensajería interna ha dejado de ser una tendencia para convertirse en una necesidad, una herramienta clave para la comunicación de decisiones y la gestión de la incertidumbre.

Se pueden detallar muchos aspectos que demuestran que la comunicación es una pieza esencial para los colegios y las familias, pero no solo para ellos, una comunicación interna en la que se valora la dedicación y la labor educativa puede afectar favorablemente al salario emocional de los educadores.

Es sabido que la tecnología es la principal vía de comunicación y es hora de exigir congruencia al sistema educativo. Resistirse a los cambios socioculturales y anclarse a sistemas educativos ancestrales no es beneficioso para nadie, sin embargo, apostar por la innovación y hacer uso de las herramientas digitales significa potenciar el entendimiento entre las comunidades educativas.

En cualquier caso, la realidad de hoy en día dista mucho de la existente en tiempos pasados y queda fuera de duda que actualmente hay un interés común en el entorno educativo, buscar siempre el beneficio del alumno. En virtud de ello, está en nuestras manos acogernos a las posibilidades digitales que nos dan las nuevas tecnologías para trazar un camino que nos guie hacia la consecución del objetivo final, mejorar la calidad de los sistemas educativos.

En Clickedu apostamos por una comunicación bidireccional siempre enfocada al aprendizaje del alumno, y vemos a la familia escuela como una auténtica alianza educativa. Por este motivo, la plataforma digital de Clickedu está diseñada para lograr una comunicación transparente y crear un clima escolar rodeado de relaciones saludables y positivas.